Me llamo Paula Redondo tengo 23 años y soy de Madrid. Estoy en mi último año de carrera, estudio un doble grado de Bellas Artes y Diseño. Mi obra se centra en la temática costumbrista porque me apasiona lo cotidiano, aquello que nos rodea y que a menudo pasa desapercibido. Los bodegones de escenas de bares no son solo composiciones artísticas para mí; son fragmentos de mi vida.
Cada cuadro que pinto es, en cierto modo, una pieza autobiográfica. Es mi forma de expresar y compartir mi punto de vista con el mundo. A través de mis pinceladas, intento capturar la esencia de esos lugares y momentos tan familiares.
Para mí el arte es una manera de conectar con los demás, de mostrarles mi mundo y de invitarles a ver lo extraordinario en lo ordinario. Cada detalle en mis cuadros, desde la disposición de los objetos hasta la interacción de la luz y las sombras, está pasando para evocar sentimientos y despertar recuerdos.